El consejero de Salud y Política Sociosanitaria, Luis Alfonso Hernández Carrón, se ha sumado a una de las clases del Aula del Paciente, un proyecto pionero de la gerencia del Área de Salud de Mérida, y cuyos resultados se extenderán al resto de la región, apostando por el papel de la Atención Primaria en su función de velar por la Salud Pública y contribuir a la humanización de la sanidad.

Se trata de un proyecto, fruto de la entrega y la implicación de nuestros profesionales sanitarios, que día a día trabajan para ofrecer a los ciudadanos nuevos modelos organizativos que ubiquen a las personas en el centro del sistema, animándoles a asumir más responsabilidad y a ser más activos en el cuidado de su salud.

Las clases se iniciaron a finales del mes de abril y están cosechando una gran acogida por parte de los emeritenses, que son los primeros en beneficiarse de esta iniciativa que, en esta primera fase está centrada en los pacientes diabéticos, teniendo en cuenta que es una patología muy extendida y con gran prevalencia.

Según la última Encuesta Europea de Salud, se estima que unos 80.000 extremeños padecen esta enfermedad. Una cifra a la que hay que añadir en torno a otras 23.000 personas que en la región podrían tenerla actualmente sin saberlo.

Estos datos, suponen que en la comunidad autónoma el porcentaje de incidencia de la diabetes se sitúe cerca del 13,8 por ciento, una cifra ligeramente superior a la media nacional, que está en torno al 12 por ciento, ha explicado el consejero.

En palabras de Hernández Carrón, iniciativas como esta “pretenden mejorar la calidad de vida de las personas, ayudándolas a adquirir las competencias necesarias para el autocuidado responsable de su salud” y “son una muestra del esfuerzo del SES por situar al paciente en el centro del sistema y hacerlo de la mano de la Atención Primaria”.

En la puesta en marcha de esta iniciativa, ha detallado, participan cinco profesionales sanitarios que se encargan de impartir estos talleres en los centros de salud de la capital extremeña y que, previamente, se han formado en técnicas de comunicación y manejo de grupos. Los talleres, que se imparte semanalmente, están formados por grupos de un máximo de 10 pacientes, para poder ofrecer una formación más personalizada.