Jueves, 12 de septiembre
Viernes, 13 de septiembre
Sábado, 14 de septiembre
Domingo, 15 de septiembre
Lunes, 16 de septiembre
Martes, 17 de septiembre
Miércoles, 18 de septiembre
HISTORIA DE LAS CAPEAS DE SEGURA DE LEÓN:
Se celebran del 13 al 18 de Septiembre aunque se pueden retrasar un par de días de modo que siempre comprendan un fin de semana completo.
El fin de semana previo a las capeas se celebra el homenaje a "la tranca”, especie de horquilla de madera que con el tiempo se convirtió en el símbolo de la concesión anual de las capeas por parte de la autoridad.
Los preparativos comienzan a primeros de mes con la instalación de los tablaos y troneras y la celebración de un quinario en honor del Cristo de la Reja.
Este termina el día previo al inicio de las fiestas coincidiendo con el pregón y proclamación de Vaquera Mayor y Zagalas, desde los balcones del ayuntamiento.
El día 14 se celebra solemne Función Religiosa en la iglesia del Cristo de la Reja.
Tres elementos son fundamentales en la celebración de las capeas:
El ganado cerril (vacas), desde mediados del siglo XVI el ganado pasta en las dehesas segureñas y es gratuitamente cedido por los ganaderos locales, miembros de la "Asociación de Ganaderos Pro- Capeas", para la diversión de los asistentes a los festejos. Este ganado y los bueyes de labor se citan en las ordenanzas de 1602, agrupado en rebaños de veinte o veinticinco reses, número de vaquillas que se torean cada tarde de capeas.
La tradición maderera fundamental para la arquitectura de esos días. Se hacen tablaos para ver las vaquillas, troneras para verlas y torearlas y la corralá, donde se encierra al ganado para seleccionarlo. Todo ello con madera, clavos y sogas.
La plaza, es el marco idóneo y esencial que acoge el desarrollo de estos festejos y otros similares desde finales de la Edad Media. Se cubre de arena hasta la zona de la corralá.
Y tres momentos son claves en el festejo de cada día:
La entrada: Las vaquillas son trasladadas desde la dehesa con caballos o en camiones, corriendo a lo largo de la calle de La Fuente y Pérez Jiménez hasta llegar a la plaza donde permanecerán varias horas. Esto ocurre en torno a las tres de la tarde, nunca antes, pero sin hora fija.
El encierro: a las 6 en punto de la tarde por el reloj del ayuntamiento, y al grito de "a encerrar que se va la tarde" y silbidos, se llevan a la "corralá", ubicada en la calle Castillo, de donde irán saliendo una a una para ser toreadas en lo que propiamente se entiende por capea.
La capea: se prohíbe causar daño a las reses con palos o cualquier otro medio, las vacas han de volver íntegras a su lugar de pasturaje y se prohíbe estar en la plaza a menores de dieciocho años.
Una vez que se termina de torear la vaca es devuelta por la calle Pérez Jiménez por donde se dirigirá hacia el Embarcadero o “Pilarito”, donde se agruparán las reses para ser devueltas al campo.
También cuenta con una capea diurna para mujeres y otra simulada para niños, el día suele variar. Todos los días, incluido el del Pregón, por la noche se celebra la verbena en el paseo, con la actuación de conjuntos musicales hasta bien entrada la noche.
Otro de los acontecimientos recientes es el “simulacro de fin de año”, el último día a las 12 de la noche se reparten uvas para todos, donde se comen al son de las campanas del reloj de la plaza y se celebra el fin de capeas.
