El Secretariado Diocesano de Migraciones convoca a una vigilia de oración el jueves 18 de febrero a las 20.00 horas en la Ermita de la Paz, (Plaza Mayor, Cáceres).
Cáritas Diocesana convocará también el jueves siguiente, el 25 de febrero a las 20.00 horas en la Plaza de San Juan a un nuevo círculo del silencio para reflexionar sobre este tema.
La trata de personas es un problema mundial y uno de los delitos más vergonzosos que existen, ya que priva de su dignidad a millones de personas en todo el mundo. Los tratantes engañan a mujeres, hombres y niños de todos los rincones del planeta y los someten diariamente a situaciones de explotación. Si bien la forma más conocida de trata de personas es la explotación sexual, cientos de miles de víctimas también son objeto de trata con fines de trabajo forzoso, servidumbre doméstica, mendicidad infantil o extracción de órganos.
El papa Francisco mantiene una actitud de denuncia constante ante esta realidad. Sus palabras son: “El tráfico de seres humanos es una llaga en el cuerpo de la humanidad contemporánea, una llaga en la carne de Cristo. Es un delito contra la humanidad”.
Dentro de los objetivos de los Secretariados de Migraciones de las diócesis de nuestra Provincia eclesiástica: Mérida-Badajoz, Coria-Cáceres y Plasencia, está el tomar conciencia de esta grave situación de la Trata de Personas.
¿Qué es la trata de personas?
El triste fenómeno de la “trata”, como dice el Papa Francisco: “No esclavos sino hermanos”, no se refiere sólo a las mujeres destinadas a la prostitución, sino también al tráfico de niños, de personas, destinadas al trabajo forzado o a la mendicidad, al tráfico de órganos.
Este fenómeno global implica a los Países de procedencia de las personas víctimas de “trata”, a los de tránsito y a los países de llegada de tantos niños, mujeres y hombres.
¿A cuántos afecta y qué dinero se mueve?
Anualmente 2.500.000 personas son víctimas de trata y de esclavitud. Mayoritariamente, mujeres y niños. Es la actividad ilegal más lucrativa en el mundo. Genera 32.000 millones de dólares al año. Es el tercer negocio más rentable, después de los tráficos de drogas y armas.
¿Qué hacemos en este Año de la Misericordia?
Proponemos que en todas las parroquias, colegios, grupos, movimientos…donde sea posible:
Celebrar vigilias de oración. Cada parroquia que lo organice cómo y cuándo crea conveniente. Nos podemos unir en cualquier fecha que la Parroquia, grupos, movimientos, colegios etc, lo crean conveniente. Lo importante es hacerlo.
Ahora, en Cuaresma, en cualquier otra celebración, hacer peticiones, recordar en la homilía etc, esta grave e injusta situación por las que pasan tantos hermanos.
Nos comprometemos a visibilizar y sensibilizar, para erradicar la explotación de la vida y de todo lo que va en contra de la dignidad de la persona. “Terminar con la trata empieza en ti”
