El consejero de Salud y Política Social, Luis Alfonso Hernández Carrón, ha transmitido hoy su apoyo y comprensión a los médicos extremeños, pero les ha pedido también su colaboración para afrontar con éxito el “desafío” de hacer sostenible el sistema sanitario, una tarea que implica “a todos”.

Hernández  Carrón ha lanzado este mensaje en la Facultad de Medicina de Badajoz, donde ha asistido al acto académico con motivo de la Festividad de San Lucas, patrón de esta profesión.

“La sanidad que heredarán nuestros hijos está en nuestras manos. En las de los gestores, en la de los profesionales sanitarios, en la de los pacientes”, ha afirmado el consejero, para quien hay que mirar hacia el futuro, conscientes de cuáles el puntode partida, y trabajar cada día para que exista un mañana mejor. “Sin vosotros es imposible”, ha manifestado a los presentes.

En su intervención, ha definido a la sanidad como la joya de la corona de la democracia española, un sistema público, universal y gratuito que ha desarrollado las cotas más altas de calidad en estos últimos años.

Ha aclarado que todos los ciudadanos deben implicarse en el reto de seguir disfrutando de este sistema y de hacerlo sostenible, más en un momento tan complicado como el actual. Esta tarea, ha añadido, “no será posible si los propios profesionales no se ponen a empujar este pesado carro al lado de los gestores públicos”.

Ha argumentado que la acumulación de errores y el hecho de que no se adoptaran cambios a mejor en momentos de bonanza, han provocado que hoy transitemos “por este oscuro túnel”, en el que la propia sostenibilidad del sistema se pone cada día en tela de juicio.

Por ello, ha insistido, “ha llegado la hora de que nuestros propios profesionales sean parte activa de esa ingente tarea que nos desafía para hacer sostenible nuestra sanidad”, y ha recordado su propuesta de Pacto por la Sanidad en Extremadura.

Hernández Carrón ha lamentado además que se asista a una pérdida progresiva del respeto hacia la profesión que por antonomasia ha sido la más reverenciada del mundo y ha aseverado que “no puede haber titubeos ni medias tintas, y mucho menos dobles discursos, frente a la agresión que se cometa contra un médico”.

En su opinión, velar por que los episodios de violencia contra estos profesionales no se vuelvan a repetir debe implicar a todos los ciudadanos.

El consejero ha abogado por recuperar la percepción del “médico muy amado” -tal y como San Pablo se refirió a San Lucas-, la del médico que también sirve a los de abajo, “un papel que sin duda se cumple plenamente en la prestación de este servicio público”.