Las tiendas que la cadena de electrodomésticos e informática Urende tiene en Plasencia y Badajoz echarán el cierre el próximo sábado, día 27, un hecho que supondrá la pérdida de 39 puestos de trabajo.

En total, la cadena cerrará 12 de las 22 tiendas que tiene repartidas por España permaneciendo abiertas las instaladas en Córdoba, Tomares (Sevilla), Málaga, Jaén, Granada, Huelva, Almería, Vícar (Almería), Jerez de la Frontera (Cádiz) y Ciudad Real.

La venta "con personal" de la tienda de Plasencia -junto a la de  Badajoz y Burgos- era la última oportunidad que le quedaba a sus 17 trabajadores para no pasar a formar parte del expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) de dos meses aprobado entre la dirección y los sindicatos.

El 85,7 por ciento de los trabajadores de Urende apoyaron el preacuerdo alcanzado a finales de julio con la dirección para aplicar un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) de dos meses a 450 empleados de los más de 700 que conforman la plantilla.

Dicho expediente ya tiene el visto bueno de la Dirección General del Ministerio de Trabajo aunque serán finalmente 390 los trabajados afectados, entre los que se encuentran la totalidad de la plantilla de Plasencia.

Los empleados incluidos en el ERTE recibirán de la empresa un complemento de 400 euros lineales, 100 euros para los empleados que a la finalización del ERTE permanezcan en la empresa, como complemento al desempleo, y 300 que se sumarían a las futuras indemnizaciones para las extinciones definitivas de contrato.

Transcurridos esos sesenta días, si la empresa no redefine su deuda, estos trabajadores se incluirán en un ERE ordinario.