La secretaria general de Cultura destaca la importancia de los nuevos retos y proyectos en la presentación del Festival de fotografía ‘Negativo’

García Cabezas ha hecho estas declaraciones durante la presentación de la primera edición del Concurso Festival de fotografía ‘Negativo’, organizado por la Agrupación Fotográfica Extremeña (AFE) y en el que toman parte, además de la citada agrupación, la Consejería de Cultura, Turismo y Deportes, el Museo Extremeño e Iberoamericano de Arte Contemporáneo (MEIAC), la Fundación CB, la Diputación de Badajoz y el ayuntamiento pacense.

“Es una enorme satisfacción poder presentar nuevas iniciativas que surgen de la colaboración entre la ciudadanía y las instituciones que aquí estamos presentes”, ha apuntado García Cabezas, quien ha subrayado la importancia de “comprender, aprehender y poner en valor el arte de la fotografía” así como la colaboración del MEIAC en este proyecto.

Miriam García Cabezas ha recordado la apuesta que por la fotografía lleva realizando la Secretaría General de la que es responsable, aludiendo a muestras como ‘Rev/veladas’, que pudo verse en Sala Europa o la muestra fotográfica sobre la primera visita de Alfonso XIII a Las Hurdes.
Negativo.

El festival de fotografía en Badajoz ‘Negativo’ es una apuesta de la Agrupación Fotográfica Extremeña (AFE) que se celebrará el segundo fin de semana de noviembre y está patrocinado y promovido por Fundación CB. La idea, según señala Emilio Jiménez, responsable de Fundación CB, es que durante el mes de noviembre, además de las jornadas con encuentros y conferencias, se "respire" fotografía en la ciudad de Badajoz, con exposiciones en varios espacios de la ciudad. El festival está dirigido a profesionales y aficionados a la fotografía, y nace con el objetivo, entre otros, de difundir el arte fotográfico como medio de expresión, comunicación y participación cultural en la ciudad de Badajoz y, por extensión, a toda Extremadura.

La organización del festival invitó al MEIAC a participar en el mismo, para aprovechar los beneficios mutuos que aportaría. “Para el Museo es muy importante estar abiertos a la ciudad y colaborar como espacio público en los eventos y actividades culturales que tengan relación con nuestras líneas de trabajo y acordamos la colaboración mediante una exposición de un conjunto de piezas de la fotógrafa Isabel Muñoz, pertenecientes a la Colección Permanente del MEIAC, realizadas dentro de una de las ediciones de Fotocarnava”, ha apuntado Catalina Pulido, directora del MEIAC

FOTOCARNAVAL

En el año 1997, el MEIAC inició el proyecto FOTOCARNAVAL, en el que se invitó a una serie de fotógrafos de reconocido prestigio a fotografiar el Carnaval de Badajoz, para interpretar con sus cámaras diversos aspectos de la fiesta. Los trabajos que realizaron, aunque diferentes, tuvieron en común el prescindir de imágenes tópicas, para adentrarse en la búsqueda de visiones personales. El resultado de estos trabajos era objeto al año siguiente de una exposición, sucediéndose en años alternos los trabajos de campo y las exposiciones.

En el año 2000, fueron seis fotógrafas quienes miraron el carnaval pacense desde su propia perspectiva, seis mujeres de muy diferentes características que supieron interpretar a la perfección los meandros que ofrece el carnaval, aportando puntos de vista novedosos y sumamente interesantes. Isabel Muñoz orientó su trabajo en dos direcciones, una de inmersión en el proceso de vestir el disfraz en casa y en esas fotografías, de mayor tamaño, contemplamos los juegos del disfraz más simple: el del propio cuerpo, enfrentado a la voluptuosidad del carnaval. Además de esto, también montó una especie de estudio de fotógrafo ambulante al que invitó a posar disfrazado a todo aquel que lo desease; los fotografió dejándoles completa libertad de pose y movimiento para que cada uno expresase su propia visión del mismo.

Además, en el MEIAC, el Festival organizará una exposición del fotógrafo pacense Félix Méndez, profesional con una sólida obra y una amplia trayectoria: ‘Hab 306’, un proyecto que nace de la muerte del padre del fotógrafo, que falleció en los momentos más duros del confinamiento: hospitalizado, enfermo y solo. Al recoger sus pertenencias, un número se repetía una y otra vez, cosido y bordado en todas sus prendas: 306, y ese es el leitmotiv de la muestra.