Todavía quedan las gotas de lluvia resbalando por las hojas de las encinas y depositándose dulcemente sobre el suelo adehesado. Ha estado lloviendo durante la noche y, con las primeras luces, comienzan a abrirse claros entre nubarrones violetas y dorados. Atrás quedaron las Lagunas de la Albuera camino de Torre de Miguel Sesmero... VER ARTÍCULO COMPLERO