La Policía Local de Plasencia ha asegurado que la detención de una cuidadora que supuestamente ha agredido al anciano para el que trabajaba quitándole la cánula que tiene en el cuello y que le permite respirar es un suceso "aislado, desgraciado y extraño" que se pudo solucionar rápidamente.

El pasado viernes, día 23, la Policía Local de Plasencia requirió la presencia de la Policía Nacional en el domicilio del hombre de 81 años ya que, al parecer, su cuidadora le había intentado agredir retirándole una cánula que tenía en las vías respiratorias.

Los agentes detuvieron a la mujer, que fue puesta a disposición del Juzgado de Guardia de Plasencia, cuyo titular decretó su puesta en libertad con cargos a las pocas horas.

En este sentido y ante el revuelo que ha generado esta noticia en la población placentina, el intendente de la Policía Local, Enrique Cenalmor, ha lanzado un mensaje de "tranquilidad" a todos los vecinos del municipio y especialmente a todos aquellos que necesitan de los cuidados de otras personas para determinadas actividades cotidianas o necesidades personales.

En una nota, el responsable de la Policía Local ha puesto de manifiesto que "estamos ante un suceso desgraciado, aislado y extraño que se pudo solucionar rápidamente y que las autoridades policiales y judiciales están investigando a fondo".

A su juicio, se trata de una situación "que es posible que no vuelva a producirse, ya que tienen que concurrir muchas circunstancias, tanto personales como situacionales".

Enrique Cenalmor ha transmitido que los cuidadores "son seres humanos que cada día miran por el bienestar de las personas que tienen encomendadas" y ha apuntado que si los ciudadanos ven algo extraño no deben dudar en contactar con la Policía Local.