El sobreseimiento y archivo definitivo de la denuncia interpuesta por la Consejera de Educación de la Junta de Extremadura contra el diputado socialista Antonio Gómez Yuste requiere que alguien asuma las responsabilidades por haber judicializado la labor de oposición. Así lo han dicho hoy el propio diputado y el portavoz de Educación del Grupo Socialista, Luciano Fernández.

Antonio Gómez Yuste fue denunciado en 2013 por “revelación de secretos” en el caso de la filtración de un examen en el programa de la ESO de los mil euros al haber colgado en su página de facebook un examen que ya circulaba por internet. “Querían llevarme a la cárcel por hacer mi labor de oposición”, ha dicho el diputado socialista, que ha recordado que el presidente de la Asamblea de Extremadura no le protegió, como así se lo exige el Reglamento de la Cámara, al no solicitar que fuera el Tribunal Superior de justicia quien llevara el caso y permitir que la policía entrara en el grupo parlamentario y en su casa.

Por ello, Gómez Yuste ha pedido la dimisión del Presidente del Parlamento, Fernando Manzano, por “no estar a la altura de su cargo”, y de la Consejera de Educación, Trinidad Nogales, por judicializar su labor de oposición. Además, ha añadido, ambos deben pedir perdón a los perjudicados por la filtración de un examen que la propia consejería debía custodiar.

El portavoz de Educación, Luciano Fernández, quien mostró una foto de archivo de la consejera Nogales en el juzgado denunciando a Gómez Yuste, abundó en la responsabilidad de la consejera por seguir una vía judicial de enfrentamiento y acusación contra un diputado de la oposición y que ha dado como resultado el sobreseimiento. Vía que también fue sostenida por la vicepresidenta Cristina Teniente y el propio Monago.

Fernández calificó el programa de la ESO de los mil euros como un “desastre”. “Para este curso se inscribieron alrededor de 3.100 alumnos, de los cuales un 40% lo abandonaron y del 60% restante solo lo culminan un 30%”, ha dicho, calificando el programa de una operación de marketing y un señuelo para los jóvenes”. Gómez Yuste añadió que “lo último” de este programa ha sido suprimir el examen final.